Esperandote
Uno siempre escucha que hay que valorar las cosas del pasado y dejarlas ahí, y ser feliz con el hecho de haberlas vivido, sin angustiarse pensando en que no las volveremos a vivir, sin embargo tampoco podemos dar por seguro que las cosas continuaran igual. ¿Cómo equilibrar el pesimismo de que algo es tan bueno que no se volverá a repetir, con un optimismo de que todo seguirá igual de bien?
Bueno, algo si es verdad, cada día aprendemos algo nuevo, con nuestros propios errores, con los errores ajenos, con pruebas de verdadera amistad o pruebas claras de envidia y deslealtades, aprendemos que la confianza es algo que a veces regalamos con demasiada facilidad y nos damos cuenta cuando alguien la traiciona.
Lo que tu piensas que es cierto puede cambiar en cosas de horas o minutos, me pasó a mi que por tratar de ser realista cai en el pesimismo y ahora se que lo mejor es esperar con calma las sorpresas de la vida.
El adios había sido mas dulce que otras veces y eso debía haber calmado a mi corazón, sin embargo me torturaban muchas preguntas al saber que no te vería en tantos días, pero no contaba que estarías otra vez frente a mi, mirandome para variar sin muchas ganas de dar explicaciones, con esa actitud indiferente que no hacía otra cosa que confirmar mis angustias y otra vez tenía la certeza que no te importaba.
Al día siguiente me propuse demostrar que tu actitud no me dolía y que todos pudieran ver que seguía siendo yo, pero ahora de verdad te marchabas, estaba tan pero tan segura que te daba lo mismo verme o no, que me costó mucho fabricar una sonrisa ese día, sin embargo nos volvimos a encontrar y me miraste de una manera que me hizo sentir la mujer mas hermosa del mundo, me abrazaste y besaste como si fueran años sin vernos y fuesen a pasar otros tantos sin tocarnos...
y en silencio me quedé recordándote
y sigo aquí, donde me dejaste... esperandote.
Bueno, algo si es verdad, cada día aprendemos algo nuevo, con nuestros propios errores, con los errores ajenos, con pruebas de verdadera amistad o pruebas claras de envidia y deslealtades, aprendemos que la confianza es algo que a veces regalamos con demasiada facilidad y nos damos cuenta cuando alguien la traiciona.
Lo que tu piensas que es cierto puede cambiar en cosas de horas o minutos, me pasó a mi que por tratar de ser realista cai en el pesimismo y ahora se que lo mejor es esperar con calma las sorpresas de la vida.
El adios había sido mas dulce que otras veces y eso debía haber calmado a mi corazón, sin embargo me torturaban muchas preguntas al saber que no te vería en tantos días, pero no contaba que estarías otra vez frente a mi, mirandome para variar sin muchas ganas de dar explicaciones, con esa actitud indiferente que no hacía otra cosa que confirmar mis angustias y otra vez tenía la certeza que no te importaba.
Al día siguiente me propuse demostrar que tu actitud no me dolía y que todos pudieran ver que seguía siendo yo, pero ahora de verdad te marchabas, estaba tan pero tan segura que te daba lo mismo verme o no, que me costó mucho fabricar una sonrisa ese día, sin embargo nos volvimos a encontrar y me miraste de una manera que me hizo sentir la mujer mas hermosa del mundo, me abrazaste y besaste como si fueran años sin vernos y fuesen a pasar otros tantos sin tocarnos...
y en silencio me quedé recordándote
y sigo aquí, donde me dejaste... esperandote.